"El agua de primavera, cobijada en el agujero de una roca, reluce suavemente cuando se la perturba. Las vibraciones de la tierra dan origen a ondas muy fuertes que chocan entre sí de forma irregular en la superficie, sin encresparse.
Si existe un verbo que signifique "moverse armoniosamente" debería ser usado aquí. Los cerezos, encojidos en las sombras, se extienden y entrelazan, se balancean y enrollan,al ritmo del agua. Pero lo interesante es que... por mucho que cambien, mantienen siempre la forma de un cerezo."
Año: 1993.